CMT apunta a realizar el 30% de los exámenes de salud ocupacional e inicia expansión internacional en Perú

Partió a fines de 2012 como una startup que a partir del desarrollo de un software de gestión se puso como meta abordar un nicho específico de la salud laboral: los exámenes requeridos en la admisión de un puesto de trabajo, con el objetivo de abordar las brechas e ineficiencias que observó en este proceso a manos de las alternativas tradicionales.

Desde entonces, los ingenieros Germán Topali, Ignacio Henderson y Sebastián Laserre, fueron dando forma a un emprendimiento con recursos y esfuerzos propios hasta lograr el despegue de Centro Médico del Trabajador (CMT), que ellos destacan como la principal entidad privada en salud preocupacional (previa a la suscripción de un contrato laboral) y ocupacional no ligada a las mutualidades.

Así, declaran haber alcanzado una participación cercana al 18% en este segmento sólo detrás de los principales conglomerados del sistema: la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) y la Mutual de Seguridad. En la actualidad, CMT realiza unos 5.000 procedimientos diarios de diagnóstico para un promedio en torno a 600 pacientes, atendiendo mensualmente a unos mil RUT de empresas dentro de una cartera que bordea los 8.000 clientes que tienen la necesidad de certificar la condición de salud de sus trabajadores.

Actualmente, CMT tiene once centros ubicados en nueve regiones del país, a los cuales sumarán la inauguración de otra nueva este mes en la ciudad de Puerto Montt. Además, trasladarán la sucursal en Antofagasta a dependencias más amplias, indica Topali, quien anticipa que el plan es completar una red de 14 oficinas en 2022.

“Con este crecimiento sostenido, a final de año podríamos llegar al segundo puesto en participación de mercado”, prevé Henderson, ya que la expectativa de CMT apunta a subir su presencia a un 30% del segmento en el mediano plazo.

Claves del negocio

Desde su partida con un centro médico, un doctor y dos TENS (técnicos en enfermería a nivel superior), la firma cuenta en la actualidad con un equipo de más de 200 personas. “En general, los sistemas de salud no está diseñados para hacer este tipo de evaluaciones y una persona podría pasar una semana haciéndose exámenes. Nuestra oferta de valor es tener el resultado de la evaluación en 24 horas, gracias a que contamos con los sistemas equipos y espacios físicos diseñados para un flujo más eficiente”, explica Laserre.

Junto a una amplia variedad de baterías de exámenes ocupacionales en su red de centros y mediante operativos en terreno, CMT también instala y opera salas de primeros auxilios o policlínicos en las dependencias de empresas de diversos rubros. “Contamos tecnología de punta en equipos médicos en cada área , totalmente digitalizados según nuestro sistema de administración y gestión de exámenes que nos permite ser eficientes y rápidos”, indica Henderson.

Topali explica que su expertise les ha permitido gestionar los flujos de pacientes y atender toda la batería de exámenes en un lapso promedio de entre una hora y una hora y media “gracias la optimización de nuestro proceso basado en tecnología que nos diferencia, ofreciendo tiempos mucho más bajos que la competencia, que tras mejorar se ubica en torno las cuatro horas”.

Salto internacional

CMT está preparando su internacionalización comenzando en Perú, la primera escala de su plan en la región. “Esperamos tener operativas tres sucursales a fines de este año o a principio del próximo. Tenemos sinergias con actuales clientes que tienen operaciones en ese país y que están felices con que vayamos”, señala Topali en relación a esta fase del plan que realizarán con capitales propios.

Además, la empresa está evaluando opciones en Colombia y México. “En Latinoamérica pasa algo muy particular. Si bien creemos que en Chile estamos más avanzados, en esta industria en particular estamos más atrasados ya que en los países mencionados, y en otros, la realización de exámenes ocupacionales es ley y cada trabajador que va a entrar a un nuevo puesto se tiene que hacer una evaluación de salud. Vemos oportunidades muy interesantes de llevar este modelo, basado en tecnología a estos países donde sí hay mucha competencia”, agrega.

“Hemos recorrido un camino largo y nada fácil, certificándonos frente a los mandantes y demostrando que podemos dar los mismos servicios que las mutuales. Lo hemos ido logrando y ahora estamos acreditados en todas las mineras del país”, recapitula Laserre. Así resume la trayectoria donde también han sumado clientes en otras áreas como el proyecto MAPA de la empresa Arauco, constructoras de concesiones viales y puertos, y Metro, tanto con sus contratistas de obras como a cargo de las salas de primeros auxilios y policlínicos en ocho estaciones.
A diez años de su partida, CMT inicia una nueva etapa con la salida de los tres socios fundadores de la administración para “enfocarnos en la expansión terminando de consolidar en Chile los puntos que faltan, e internacionalizarnos”, explica Topali.
Para concretar este proceso, este mes asumirá como nuevo gerente general Juan Pablo Plaza, profesional con más de 25 años de experiencia en instituciones de salud pública y privada, destacando su trayectoria de casi seis años en la Mutual de Seguridad, donde ejerció como gerente corporativo de Operaciones y en igual cargo en el Hospital Clínico.